Virxilio
lunes, marzo 23, 2009
Me fascina la historia de Virxilio Viéitez (Soutelo de los Montes, 1930).
La descubrí hace ya un buen tiempo, paseándome por el blog de escritura ocular de Javier Miranda Luque, y desde entonces no se detiene mi encantamiento. Como comenta, con justicia,Sofía Moro, para soitu.es:
El día que Christian Caujolle, director de VU, una de las más prestigiosas agencias de fotografía del mundo, conoció la obra de Virxilio Vieitez, supo que tendría que replantearse la historia del retrato fotográfico del siglo XX. Justo ese mismo día Virxilio veía una exposición de fotografía por primera vez en su vida: la suya propia.
En efecto, Virxilio Viéitez fue un genio autodidacta de la fotografía hasta el límite del desconcierto.
Fotografió. Y lo hizo mucho, pero sus fotografías nacieron del interés pragmático de responder a una necesidad demasiado obvia: sacar las fotografías que los pobladores de Soutelo de los Montes, en Pontevedra, Galicia, necesitaban para sus actividades de notaria.
Comenta El País, en su Obituario:
Campesinos, niños con traje de fiesta, viudas enfundadas en sus trajes negros o cortejos fúnebres pasan ante su cámara que siempre capta a las personas al aire libre y en un entorno que descubre la dura realidad social de la época. La mayoría de las fotos que realizaba estaban destinadas a ser incluidas en documentos oficiales y Vieitez tenía que recuadrarlas para hacer desaparecer el paisaje que salía reflejado en ellas. Años después ese entorno reapareció para descubrir la miseria que rodeaba a los personajes de la Galicia de esa época.
Como en un cuento de hadas, el blogger Victor Roblas señala:
No alcanzó ningún reconocimiento hasta que en 1997 su hija montó una exposición con sus fotografías en Soutelo, que sería vista por Manuel Sendón y Suárez Canal, los que tratan por todos los medios de que la obra del soutelano sea conocida no sólo en Galicia, sino en todo el mundo.
Estas son algunas de sus maravillas:
Etiquetas: Píxeles En La Mirada
2 Comments:
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John Souto Rey, abril 10, 2009 12:20 a. m.
John Souto Rey, abril 10, 2009 12:20 a. m.
Yo estoy fascinado con Virxilio, John. Me impresiona, por una parte, descubrir rostros muy lejanos que, sin embargo, se parecen a otros rostros que he visto en el trópico. Me impresiona la mezcla de solemnidad y tristeza de las fotos. Esa sensación levemente grandiosa y levemente trágica de los rostros.
Buscando en la red podrás encontrar algunas cuantas que no incluí aquí.
Un abrazo.
Buscando en la red podrás encontrar algunas cuantas que no incluí aquí.
Un abrazo.
Mi familia, gallega al fin, devela muy poco de su vida en aquella época y por esas aldeas. Malos recuerdos y mucha morriña, supongo son las razones de dicha actitud. A mi en cambio, cuando me topo con materiales como los de Virxilio me siento levemente reconfortado y curioso de seguir escudriñando en esos orígenes, en esa cultura.
Te agradezco que hayas divulgado a través de tu blog a este autor y su obra. Quizás hasta se lo muestro a mis padres. Un abrazo… John.